Castagnino
Del 05.07.13 al 14.10.13

La colección en foco. 2

Europa en el horizonte. Paisajes pintados en viajes de estudio

Schiaffino, Eduardo

Una breve selección de pinturas y grabados testimonia vistas de estas pródigas ciudades europeas en la época en que nuestros artistas las habitaron temporalmente. Su exhibición intenta evocar el espíritu de esta época de juventud, descubrimiento y ensayo.

Silva, Ramón. Paisaje de Plaisire Gnignon

El viaje de estudios a las capitales europeas fue una práctica frecuente entre los artistas argentinos desde las últimas décadas decimonónicas y fue ganando cada vez más seguidores en los inicios del nuevo siglo. 

Los jóvenes ávidos de formación e inspiración mediaron entre la cultura del viejo continente y el público local, a través de la exhibición en Buenos Aires de sus obras impregnadas de las enseñanzas extranjeras y de la publicación de crónicas de sus vivencias en el mundo artístico europeo, como lo hizo Eduardo Schiaffino en El Diario y en Sud América.

Si bien muchos de ellos lograron partir gracias a trabajos alternativos o al apoyo familiar, el Estado tuvo un rol destacado oficializando el viaje con un sistema de becas y subsidios que permitió a los pintores y escultores argentinos emprender la tan deseada travesía hacia la cuna de los viejos maestros. Italia y España fueron destinos que buena parte de los becarios privilegiaron –en la elección también sopesaban los orígenes familiares–, pero la ciudad de París –considerada el foco del arte internacional– fue una meta codiciada. La capital francesa alojaba estudiantes de diversos orígenes que asistían a cursos académicos o a talleres libres y arriesgaban su participación en salones con reconocimientos esporádicos. 

La tensión entre modernidad y tradición agitaba el ambiente de las exposiciones y se plasmaba en virulentos artículos de revistas y catálogos. En esta atmósfera enérgica y cosmopolita, los estudiantes asimilaron principios que repercutieron en la manera de comprender el arte. El estudio de los vieux maitres en los museos, los fuertes lazos entre maestros y discípulos, la camaradería entre los estudiantes de diferentes nacionalidades y la complicidad de la vida bohemia favorecieron el intercambio y la incorporación de ideas que gravitaron a su regreso en su obra y en la manera de ser artistas.

Una breve selección de pinturas y grabados testimonia vistas de estas pródigas ciudades europeas en la época en que nuestros artistas las habitaron temporalmente. Su exhibición intenta evocar el espíritu de esta época de juventud, descubrimiento y ensayo.