Colección Castagnino+macro

Figuras en fuga, forma parte de un conjunto de trabajos en donde Eguía retoma su Período nariguil. Convierte a las narices en personajes que deambulan por los cuadros con estilizadas, fuertes y caminadoras piernas, con trajes y máscaras, en campos y ciudades. En este caso, recurre a un fondo oscuro que le permite elevar la presencia de las figuras, que oscilan entre lo real y lo imaginario. En relación a esta oscilación, Eguía señala: “La postura que está en los cuadros la considero simplemente fantástica, ni surreal, ni onírica, ni nada que se le parezca. Es sobrenatural y tiene un contenido […]”.

Eguía presenta varias obras con esta temática en la galería Rubbers, en 2001, junto con otra vinculada al paisaje, inmediatamente asociada a El Tigre por el refinamiento de sus ramajes, los riachuelos y las lanchas.

2004




Eguía, Fermín

Comodoro Rivadavia, provincia de Chubut, 1942
Vive y trabaja en Buenos Aires

Fermín Eguía ha desarrollado a lo largo de los años una amplia producción en la que recrea escenas fantásticas —irónicas y desnaturalizadas— habitadas por personajes con referencias humanas y no humanas. Representaciones que surgen tanto de sus reflexiones sobre episodios de la historia nacional como de sus preferencias literarias y artísticas. Obras que además han sido resueltas mayormente empleando técnicas como la acuarela y el dibujo.

El autor nació en Comodoro Rivadavia, provincia de Chubut, y a los doce años se trasladó junto con su madre a Buenos Aires. Allí estudió en la Escuela Municipal de Artes y Oficios y en la Escuela Nacional de Bellas Artes Manuel Belgrano. En esta etapa de formación los profesores Ángel Borizoffo y Pablo Pereyra —dibujantes de revistas como El Tony y El Gorrión, entre otras—, fueron figuras influyentes para el desarrollo de su obra.

Tras un breve periodo de participación en el Movimiento de Liberación Nacional —organización política que en los sesenta proponía nuevas formas organizativas para las luchas obreras y el movimiento gremial argentino—, y alejado de la militancia política y la producción artística, se desempeñó por nueve años como técnico cartógrafo en el INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria) donde realizaba mapas de suelo.

Desde la década del setenta, ya retomada la producción, expone con regularidad tanto en Argentina como en el exterior.

Ha recibido importantes distinciones, entre ellas: Primer Premio Marcelo de Ridder (1974); Primer Premio Banco del Acuerdo, MNBA (1980); Primer Premio Encotel, Palacio de las Comunicaciones (1983); Premio Aldo Pellegrini, Asociación críticos de arte (2006); Segundo Premio Nacional de Pintura (2008); Primer Premio Nacional de Pintura (2009); Gran Premio de Honor del Salón Nacional de Pintura (2011); Premio Konex de Platino, Artes Visuales (2012) y Premio a la trayectoria del Fondo Nacional de las Artes (2019).

Actualmente vive y trabaja en Buenos Aires.

Septiembre 2022